lunes, 23 de marzo de 2009

Entrevista a Antón Castro






"La literatura ni es

digital ni es

tradicional: la

literatura es

literatura"

Pregunta: ¿Ha asistido a otros congresos de periodismo digital? Si es así, ¿qué le aportaron?
Respuesta: Sí, he estado siempre como espectador, he organizado tres exposiciones de fotografía en el congreso de periodismo y creo que el periodismo digital, que en este caso cumple diez años, ha experimentado una evolución enorme. Era un terreno absolutamente virgen, y de repente, hay un periodismo digital muy poderoso y eso es muy bonito. Yo comencé con el periodismo digital a través del blog y siempre digo que para mí es como una segunda vida. Me permite hacer otras cosas que no podría hacer en el periódico y eso me parece muy enriquecedor.
Primero, son una fuente de aprendizaje. Te encuentras a gente que está trabajando de una manera particular, muy personal. Yo allí he conocido a Julie Anderson, a Julio Villanueva Chang, he conocido a mucha gente. Son puntos de vista muy interesantes de nuestro trabajo. Me he encontrado con gente muy rigurosa y disciplinada y con una profesionalidad exquisita y eso me produce mucha admiración. El fondo, yo soy básicamente un aprendiz.

P: ¿Cree que el periodista nace o se hace?
R: Uno nace con una sensibilidad, con determinadas cosas que no saben lo que son. Yo personalmente no he estudiado periodismo. Sin embargo, de repente me gustaba la literatura y la literatura me ha llevado al periodismo. Me gustaba contar historias y el periodismo es una forma de contar historias, es una forma de conocer gente y de conocimiento del mundo. He aprendido mucho con la gente. También una cosa que me apasiona son los seres humanos. Realmente si me tuviera que definir yo, sería un tío al que le apasiona la vida y los seres humanos. A mí me interesa todo el mundo. Por lo tanto yo creo que el periodista se hace. En realidad todos nos vamos haciendo en la vida porque nos cruzamos con tanta gente, nos encontramos con hechos, ciudades, escritores, etc. En el fondo sería absurdo decir que uno nace. Sí, es verdad que uno nace físicamente pero yo creo que uno se va haciendo todos los días, te hace tu novio, tu mamá… en realidad nos estamos haciendo todos los días con todas las cosas y en todas las experiencias, y eso es lo que me parece más bonito.
P: ¿Cuándo descubrió usted su vocación de escritor?
R: En la adolescencia descubrí la literatura, fue por esa sensación de pérdida que produce el vivir en un pueblecito muy pequeño. Un día, cuando ya nos trasladamos a un pueblo más grande, empecé a hablar con mi madre de lo que habíamos dejado atrás, y escribí un texto. Mientras se lo leía nos caían lágrimas a los dos. Para mí la literatura fue primero un ejercicio de vocación y, más tarde, la lectura me llevó a descubrir que me apetecía contar cosas. Me aficioné a la poesía: a Bécquer, a Machado, a Lorca… Escribía poemas a las chicas de las que me enamoraba. Opino que hay una cosa que nadie te puede quitar: es el recuerdo de la infancia, siempre hay mil historias que contar. Existe en mí una hilazón entre lo que sueño, lo que he vivido y lo que en estos momentos me da la vida.
P: ¿Cómo se describe usted mejor: como escritor, dramaturgo o periodista?
R: Yo soy un escritor. No me considero un dramaturgo porque únicamente tengo tres o cuatro piezas, de las cuales hay dos publicadas. Se me describe entre otras cosas como dramaturgo porque en Galicia, mi tierra natal, figuro como así, pero no soy dramaturgo.
P: Ha trabajado tanto en periódicos como en televisión, ¿Qué medio le gusta más?
R: A mí me encantan todos los medios. El periodismo en prensa te permite escribir un texto compacto, contar una historia. En televisión me gusta poder conversar con la gente tranquilamente, haciéndola sentir como en casa. Este medio proporciona inmediatez con las imágenes, es un polinomio de cosas en el que se juntan la presencia del ser, la palabra, las imágenes, la música… Pero yo no me quedo con ningún medio en particular, todo son cosas complementarias de una forma de entender la vida, la comunicación y la creación.

P: ¿Qué opinión le merece el periodismo digital?
R: Mi opinión es claramente positiva. Todo es perfeccionable porque todo tiene defectos, como puede ser la falta de rigor profesional, pero como en todas partes. Internet es uno de los grandes inventos de la humanidad. Proporciona simultaneidad. Gracias a la rapidez que da la red, los periódicos tienen una actualización inmediata que en papel no pueden proporcionar.

P: Dada su experiencia tanto en la literatura tradicional como en la digital, puede compararlas. ¿Con cuál se quedaría? ¿Qué aspectos le gustan de una y de otra?
R: Bueno, la literatura ni es digital ni es tradicional. La literatura es literatura. Es pasión por las palabras. Es pasión por contar historias. La literatura que se llama “digital” es como una disciplina, que no es exactamente literatura. La literatura es algo en sí mismo. Tú puedes contar historias en un libro, puedes contar historias de viva voz y puedes contar historias en el formato tradicional. Lo que ocurre es que ahora lo digital ha creado nuevas modalidades de literatura. Yo no lo distingo, lo que pasa es que el formato digital es un formato inmediato y rápido que te permite tirar una botella al mar y que mucha gente en ese mar, que es Internet, acceda a ellas. Pero sigue siendo literatura igual que es literatura la escrita en papel. Además te permite tener lectores que, de otra manera, no podrían llegar a ti.
Pero la forma de escribir no cambia por el formato. Lo que debe hacer es adaptarse a las características de Internet con textos más cortos e inmediatos.
Si tuviera que elegir me quedaría con la literatura que es un ente superior, lo demás son proyecciones o lugares donde la literatura aparece.
P: Además de escribir en su blog, ¿es lector asiduo de otros blogs? ¿Cuáles suele visitar?
R: Muchos. Por citar alguno, me gusta el de Antonio Serrano Cueto, el de Fernando Valls, el de Miguel Ángel Muñoz, la Dama de las nieves, el de Mariano Gistain, el de Juan Cruz, el de Víctor Juan. También el de Daniel Gascón y todos los que tienen enlace en mi blog. Me gustan tantos que sería imposible citarlos a todos. Cada día descubro dos o tres que me vuelven loco y me siento un poco envidioso de lo bien que lo hacen, mi blog está bien, es un blog variado que siempre te sorprende con algo, pero no es un blog formalmente impecable como algunos maravillosos que hay. Mi blog es un blog de batalla, pero a mí me gusta porque no soy un experto. Soy un analfabeto informático. Sólo sé poner textos y pegar fotos.
Los blogs de mujeres me apasionan en especial porque siempre me sorprenden. Además me encantan los blogs literarios y fotográficos.
La red estimula el afán aventurero, yo siempre descubro nuevas islas del tesoro a las que quiero ir.

P: ¿En qué se basa para seleccionar el contenido de las entradas de su blog?
R: Pues no me baso en nada. Hay veces que descubro cosas o que me obsesionan ciertos temas, soy muy intuitivo. No es nada premeditado, es algo espontáneo. Me pongo a escribir y una cosa me lleva a otra. Muchas cosas me vienen de los medios de comunicación, otras de eventos a los que asisto. Por ejemplo, mi blog tiene de todo: reportajes, entrevistas, libros que acabo de leer, historias familiares, viajes que hago, gente que he conocido. Realmente, mi blog es como un gran estado de ánimo y creo que representa mi pasión y curiosidad por la vida. Todo lo humano me interesa y siempre estoy alerta. Si pudiese, estaría llenando el blog a todas horas.


P: En su blog, mezcla algunas de sus pasiones como la literatura, el cine, la fotografía, el deporte y la música. ¿Considera que la clave del éxito de un blog radica en la libertad que tiene su autor para escoger los temas que más le apasionan?
R: Un blog es un ejercicio de libertad personal. Otra cosa es que sea un blog asociado a un periódico o a una empresa. Un blog es, sobre todo, un espacio íntimo, personal, propio donde tú te desnudas en la medida que quieres, donde tú opinas con la libertad que quieres. Es lo que tú eres.
Realmente es muy difícil saber por qué triunfan las cosas pero yo creo que las claves son la variedad, la especificidad, la actualización y la calidad. Es muy importante saber que te diriges a un público amplio y que puedes ganar lectores con cosas muy diferentes. En los blogs, una cosa muy importante es tener un punto de vista personal, por eso le gustan a la gente.
Creo que mi blog es como un gran fondo de armario donde lo mejor es la variedad y la cantidad de temas que se barajan. Es un blog enciclopédico.
P: ¿Cree usted que el periodismo digital puede suponer una merma en la calidad?
R: No, para nada. Existen varias modalidades y el digital es una modalidad como la radio o la prensa. Es una disciplina inmediata. Se puede hacer en cualquier disciplina buen o mal periodismo. Lo que es malo, es malo en todas partes. El periodismo digital en sí mismo es muy bueno, pero se tiene que hacer muy bien: contando la verdad con precisión, sin mentir, sin descalificar y con respeto.
P: ¿Cree que el periodismo digital acabará con los medios de comunicación social tradicionales?
R: Creo que no. Lo que pasa es que lo que va a cambiar son los medios de comunicación. Ya ha cambiado mucho la televisión. Por ejemplo Ana Blanco ya tiene un ordenador en los informativos. El periodismo digital sí modificará muchas cosas pero no creo que vaya a cambiar. Ahora los periódicos tienen que ser mucho más creativos, contar mejor las cosas, tienen que usar mejor el tiempo que tienen hasta el día siguiente. Montar en televisión, cine, radio ya no se parece en nada.
P: Entonces, ¿cree que la prensa en papel va a desaparecer porque no tenga beneficio económico o porque la gente prefiera leerla por Internet?
R: Nunca el periodismo ha estado tan amenazado como ahora. La gente ya no compra los periódicos como antes. Además los periódicos han bajado mucho en ventas; aunque creo que tardará muchos años en desaparecer el periódico en papel.
Personalmente a mí me encanta el periódico en papel. Me encanta ver las fotografías, la textura del papel… estoy acostumbrado a esa forma de leer.
También vendrá el libro electrónico pero siempre habrá el libro en papel por su textura, color, tipografía y singularidad. Ahora el periodismo está más amenazado pero al final no desaparecerá. Además toda la industria tan poderosa que hay alrededor es muy difícil que desaparezca así de repente.

P: ¿Cree que el nuevo libro digital o los blogs representan formas de expresión literaria emergentes capaces de desbancar al formato tradicional del libro?
R: No, en absoluto. Muchos libros ya aparecen directamente en Internet. Muchos escritores ya cuelgan sus libros en Internet y hay gente que ha escrito directamente para Internet. Lo han hecho Lorenzo Silva o Mariano Gistain entre otros.
Yo creo que la magia del libro en papel no se puede sustituir por el nuevo tipo de libro. Los blogs y la literatura digital son nuevas formas de expresión que están arraigando y trayendo muchas cosas nuevas como el microcuento.
P: ¿De qué manera ha influido el periodismo en sus libros y de qué manera ha influido los libros en su forma de ejercer el periodismo?
R: Al principio lo que quería ser es escritor y empecé como tal. Hay un momento importante en mi vida que es cuando yo empiezo a trabajar en el “Día de Aragón”. En ese momento ya tenía una mano de escritor modesto como sigo siendo ahora. Entonces me empecé a fijar en la vida cotidiana, en la realidad que me daba historias y episodios fascinantes. Uno de mis primeros libros, “Pasajeros del estío” es muy importante para mí. Me fui a un pueblo con mi mujer y mis dos hijos. Entonces mi mujer me dijo que yo ya era escritor y la gente venía a casa a contarme historias y las iba anotando en un cuaderno. Los personajes existen y esas historias son reales. Otro libro, el más vendido, titulado “El testamento de amor de Patricio Ejulve” (1995) está situado en Cantavieja, un pueblo de Teruel. En este libro hago un rastreo que es muy periodístico. Yo llego al periodismo con las maletas del viajero de escritor, y luego llego a la literatura con los procedimientos del periodismo. Yo soy un escritor. Cuando escribo en un periódico utilizo técnicas del periodista y no puedo mentir, y cuando escribo un libro utilizo las técnicas del periodista pero puedo mentir o puedo recrear el mundo a mi antojo.
P: ¿Qué opina sobre la nueva forma de escribir y la poca importancia que los jóvenes de hoy en día dan a la palabra?
R: No me gusta nada. Me encantan las palabras. Yo entiendo que es un código pero me gusta el lenguaje enero como es, cuanto más bello y más preciso mejor. No puedo estar en contra por ejemplo del Messenger pero no me gusta. Si es rápido Internet ya es suficiente. Lo respeto. Me encantaría escribir con todas las palabras del diccionario y no es pedantería. Es como añadir prisa a la prisa y esto implica pobreza.
P: ¿Afectará esto en la forma de escribir de los futuros periodistas?
R: Sí que afectará. Eso es un sublenguaje. La palabra es una de las mayores riquezas del ser humano. La lengua es tan maravillosa que no se debería maltratar. Uno de los errores de la educación es haber renunciado a la literatura, al lenguaje. Una materia tan bonita como la lengua la han hecho antipática.
P: ¿Qué ha significado para usted la ciudad de Zaragoza desde el punto de vista profesional? Ya que trabaja para el Heraldo de Aragón y tiene un programa en la cadena autonómica.
R: A los 18 años me fui de casa. Yo tengo un título que nunca he utilizado para nada que es el de técnico especialista en electrónica. Empecé a trabajar como camarero y como cajero de un bingo. Aquí en Zaragoza lo he hecho todo. El 1 de julio de 1987 empecé a trabajar en el periódico “Día de Aragón”, el 20 de octubre de 1990 en el “Periódico de Aragón” y el 1 de mayo de 2001 en el “Heraldo de Aragón”. También en Zaragoza he publicado 25 libros individuales y 200 libros colectivos. Zaragoza me lo ha dado todo. Yo no entendería mi vida sin Zaragoza y sin Aragón. Solo puedo ofrecerle gratitud. Me cuesta encontrarle defectos a Zaragoza. Pero tengo que hacer una especial mención a Teruel ya que me devolvió el paisaje de mi niñez. Zaragoza me dio un paisaje urbano que no había tenido porque soy un niño de aldea y Teruel me devolvió esos paisajes rurales.

Paula Baeta, Miguel Ángel Gayoso y Cristina Marco.

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